marzo 19, 2018

Un café con… Egue y Seta

Egue y Seta es un estudio de interiorismo especializado en crear espacios de venta, ya sean efímeros o permanentes.

El estudio de interiorismo abarca diferentes áreas, ya sea la residencial, el diseño de productos, la gestión de marcas o el packaging.

El equipo de Egue y Seta está liderado por un interiorista Daniel Pérez y un diseñador gráfico Felipe Araujo, que se conocieron cursando un máster de Diseño Interior en la Escuela Superior de Diseño ELISAVA en Barcelona. Dos años más tarde en 2007 deciden fundar Egue y Seta.

Su estilo se define por el dinamismo, la funcionalidad y la frescura. Un concepto de lujo que no está ligado a muebles y materiales ostentosos, sino al espacio, la luz natural y la conexión del interior con el exterior. Sus diseños no plasman las últimas tendencias decorativas del momento, sino que buscan la mejor estética para cada cliente partiendo de sus gustos e ideas.

El estudio tiene oficinas en Barcelona, Madrid, A Coruña, y colabora con una inmobiliaria japonesa para realizar proyectos en este país.

Hoy quiero que conozcas un poco mejor las personas que están detrás del estudio Egue y Seta, nos tomamos un café con ellos mientras conocemos sus inquietudes, gustos y pasiones. ¿Me acompañas?

Proyecto: Living by the Market

Tres palabras que describan vuestro trabajo.

La gente que se califica a si misma nos gusta menos. Preferimos que nos adjetiven otros. Nos gusta mucho saber qué piensa la gente de nuestro trabajo, y si lo ponen en 3 palabras sería genial! Vosotros, puestos a describir nuestro trabajo en tres palabras, ¡cuáles escogeríais?

Lo que os inspira.

El cliente, siempre y primordialmente. Luego, y sólo a partir de ahí buscamos fuentes de inspiración concretas que se revelan pertinentes en cada caso, que pueden ser blogs, tableros de Pinterest, el bar de la esquina, el libro que estoy leyendo o la peli que vio Sarah ayer. Pero, en principio, siempre se trata de escuchar al cliente.

Proyecto: Poblenou en 3 actos. 2do acto

Vuestro desafío deco más grande.

En el que estamos trabajando ahora mismo o el que tenemos sobre la mesa. Siempre intentamos concentrarnos, motivarnos y darle prioridad máxima a lo que estamos haciendo en el presente y en cada momento. Una vez acabados, claro que seguimos teniéndole cariño a los proyectos, pero creemos que es más importante «encariñarse» con los clientes, sus ilusiones y sus necesidades, que con lo que ya está resuelto.

Un maestro.

Es que somos muchos en la oficina y cada uno seguro ha tenido el suyo, comenzando por su papá y su mamá… Yo en particular tuve profes geniales en la carrera a los que recuerdo siempre con mucho cariño, pero quizás me han enseñado más los industriales en la obra, los clientes difíciles, o los proyectos que han salido mal…y a éstos, claro, les tengo menos cariño. Jaja!

Proyecto: Poblenou en 3 actos

Seguir las tendencias ¿Sí o no?

Conocerlas, sí. Seguirlas, así, a rajatabla, no tanto. No todas encajan siempre. Y pocas aguantan el tirón de los años. La inversión en vivienda siempre es alta. Lo que se gasta cada quien en su propia casa suele ser, siempre y proporcionalmente a sus posibilidades, algo importante. Por tanto, creemos que es una inversión que debería poder durar más de un par de años. Las tendencias, mientras más acusadas, más efímeras, y con el paso del tiempo los ciclos de renovación se han hecho más cortos. Hay que ser cautos.

¿Qué es lo más bonito de vuestro trabajo?

Cada quien se «realiza» de maneras distintas. Es algo muy personal y el despacho está compuesto por muchas personas. Hay los que se sienten contentos de poder hacer proyectos diferentes, hay otros que se sienten mejor de poder especializarse cada vez más en un área en concreto. Están los que derivan mucha satisfacción de verse publicados, y otros a partir de la satisfacción del cliente. Lo importante es mantener la motivación, venga de donde venga.

Proyecto: Suite for Ten

Un diseño que siempre os emociona.

Hasta lo más perfecto cansa. El «siempre» es una utopía en el diseño, así como en muchas otras áreas. Hay que aspirar a la longevidad, pero perseguir el «siempre» creemos que sería irrealista. Todo cae en «desgracia», y con suerte se retoma luego de un tiempo… pero siempre?!!..uff.. Ojalá! … ni idea!

Un material, un color, una forma…

Pues tres cuartos de lo mismo. En general creemos que lo racional y lo ortogonal es más sencillo, práctico, funcional y más fácil de justificar. Lo cual no quiere decir que lo opuesto no pueda serlo, o no pueda ser incluso mejor. Sólo que lo primero es más sencillo.